Las ciberamenazas se dirigen cada vez más a los escenarios de eventos más importantes del mundo.
En un mundo cada vez más conectado, las amenazas cibernéticas no conocen fronteras ni límites. Los eventos deportivos de alto perfil, que atraen la atención de millones de espectadores de todo el mundo, se han convertido en un objetivo cada vez más atractivo para los ciberdelincuentes. Estos actores de amenazas están dispuestos a aprovechar cualquier oportunidad para lanzar ataques dirigidos o generalizados, lo que plantea una seria preocupación para los organizadores, las instalaciones anfitrionas y los asistentes. El Centro Nacional de Seguridad Cibernética del Reino Unido (NCSC) ha identificado una creciente tendencia de ciberataques contra organizaciones deportivas, con un sorprendente 70% de los encuestados experimentando al menos un ataque al año, muy por encima del promedio de las empresas del Reino Unido.