Las ciberamenazas se dirigen cada vez más a los escenarios de eventos más importantes del mundo.
En un mundo cada vez más conectado, las amenazas cibernéticas no conocen fronteras ni límites. Los eventos deportivos de alto perfil, que atraen la atención de millones de espectadores de todo el mundo, se han convertido en un objetivo cada vez más atractivo para los ciberdelincuentes.